Curaduría De Contenidos Digitales: Un Potencial

Curaduría de contenidos digitales: Un potencial para la Educación y el Aprendizaje
Content curation: A potential for education and learning.
Mario Fernando Posada S.1
Resumen
Este artículo presenta una aproximación a la concepción educativa de la Curación de
contenido digital. Una actividad que busca la especialización temática mediante la selección de
contenido, la re-interpretación de usos del medio digital y la convergencia de medios-soporte.
Para ello se divide el texto en tres partes: La primera introduce el concepto de Curación de
contenido, teniendo como precepto evocador el ejercicio del Curador de Arte; la segunda
despliega un análisis con diferentes elementos del potencial educativo y pedagógico-didacta
del ejercicio de Curación; y por último, se plantean algunas consideraciones metodológicas. Es
el marco fundamental que propone abordar este artículo: visualizar el valor diferencial del
Curador de contenido, para re-pensar la praxis educativa y los contenidos digitales desde su
carácter multidimensional.
Abstract
This paper presents the educational concept of Content Curation. An activity that seeks to
subject specialization by selecting content the re-interpretation of uses of digital media and
media convergence-support. This text is divided into three parts: The first introduces the
concept of content Curation, with the exercise of precept evocative art curator, the second
displays an analysis of the potential elements with different educational and pedagogicaltaught, the exercise of healing, and finally, it raises some methodological considerations. It is
the fundamental framework that seeks to address this item: display the value differential
Content
Curator
for
rethinking
educational
practice
and
digital
content
from
its
multidimensionality.
Palabras clave
Curación de contenido, práctica educativa, educador-curador, aprendiz-curador.
Key words
Curation content, content curator, educational practice, educator-curator, curator-apprentice.
1. Introducción
El presente artículo es producto de la investigación y la reflexión acerca del concepto,
Curaduría de contenidos digitales, un tema vigente que ha venido desenrollándose en gran
medida en los últimos tiempos, y el 2012, quizás el año de mayor eco en la web o como
Estudiante de la Maestría en Educación, énfasis Ambientes de Aprendizaje Mediados por TIC, Escuela de
Educación y Pedagogía, Universidad Pontificia Bolivariana-Medellín. Actual Pasante de Investigación del Grupo
Educación en Ambientes Virtuales (EAV) UPB, Medellín. Correo-e [email protected]
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1
diferentes expertos sostienen, su año más emblemático. El propósito fijado aquí, es
profundizar, analizar y observar estratégicamente su potencial para la educación y el
aprendizaje, pues la Curación de contenidos tiene un ámbito de aplicación casi ilimitado.
Y es que actualmente, frente al fenómeno exorbitante de la Social Media, con una Red en
suma caótica, transitando un devenir complejo en la “sociedad interactiva” (Giraldo, 2005),
presenciamos una infoxicación2 casi alarmante ante el exceso de información, producto en
buena medida del desarrollo social y científico, frente a las crecientes transformaciones del
entorno tecno-comunicativo.
Mientras la aparición de nuevas fabricas de la cultura, y sobre todo la proliferación de múltiples
modos de ser artistas como productores en internet, cambia completamente el modo que
tuvimos hasta ahora de entender las prácticas culturales, de fomentarlas, de pensarlas y
diseñarlas y, consecuentemente, de articularlas con otros sistemas de reproducción social, muy
especialmente el de la enseñanza y el de los negocios, un tríptico clave para entender las
derivas meméticas (Piscitelli, 2012).
He ahí la necesidad visible de buscar alternativas que refresquen y condensen praxis
especializadas, con objetos de estudio delimitados y, la Curación de contenido, uno de esos
esfuerzos que busca re-interpretar usos del medio digital.
Ilustración 1: Photo by Stuck in Customs.
http://farm4.static.flickr.com/3488/3265175057_3a9a93d0a7.jpg
2. ¿Qué es la Curación de contenido digital?
Un término que proviene etimológicamente del latín ‘curare’, que significa curar, cuidar o
preservar; término además, que viene acuñado desde la lengua inglesa como ‘content
curation’ o ‘content curator’. En lengua castellana es un término que posiblemente sea extraño;
quizás para muchos de no grata significación semántica, ya que por ejemplo, en América
latina, su referencia es casi literal a un estado que precisa cuidados; en contraste, en España,
Neologismo que hace referencia al grado de amplitud “tóxica” de la información en nuestro tiempo actual, por su
alto volumen, emergencia, complejización y saturación.
2
2
curación es una actividad referida al proceso de madurar carnes y jamones. Ya en el contexto
de Norteamérica, no acaba de gustar su significación por relacionarse casi directamente con
enfermedad como estado precedente –similar a Latinoamérica–. En cuanto al término
Curaduría, aunque es un concepto de gran significación y notoriedad socio-cultural, –en
diferentes latitudes– se asimila más su carga semántica al ámbito tecnicista y oficial de las
entidades Estatales.
La Curación de contenido digital es una actividad relativamente nueva, que emerge como
práctica de especialización y especificidad temática, con el rigor de la selección y criterios de
experticia.
Básicamente es el acto interactivo de investigar, hallar, filtrar, organizar, agrupar, integrar, editar
y compartir el mejor y más relevante contenido de un tópico específico en una significativa
colección digital online, que podría ser importante para un grupo de gente cuyo sentido del
aprendizaje puede ser actualizado en torno a ese tópico. En buena medida un Curador de
contenidos es colector, parte intérprete, investigador, parte archivista, cuya actividad se
desarrolla alrededor de:

coleccionar y organizar información relevante, introduciéndola en un contexto determinado;

conservar los archivos de información histórica más representativos, en superficies de bits
avanzados para el entendimiento de la historia que narra en sus diferentes tiempos;

cuidar la memoria de la historia objeto de curación de la mejor manera posible, de tal forma
que esté disponible para una audiencia que desee utilizarla o seleccionarla (Bhargava3, 2011;
Good, 2012; Schweigert, 2012).
La Curación de contenido tiene como símil directo el ejercicio del Curador de Arte, profesión de
expertos encargados de seleccionar, cuidar, exponer y preservar colecciones y piezas de arte,
apoyados en su experiencia y criterios profesionales, al ser justamente la imagen perfecta que
refleja propósitos y técnicas de esta interesante, llamativa y vigente actividad, que cobra cada
vez más fuerza en los medios digitales, la cual incluso, se ha designado como nueva
profesión, y el año 2012, como su año emblemático o de mayor eco en la Web, al ser
considerando por muchos como el "next big thing” de los medios sociales.
No obstante, existe actualmente polémica y proliferación de artículos respecto a su significado
y práctica en sí. Varios Museos desde su portavoces han manifestado su descontento por
llevar a estadios significativos similares el ejercicio de los Curadores de Arte, aduciendo
notables diferencias de práctica, la no equidad entre expertos que consagran su vida
profesional a la preservación del Arte, en correspondencia directa a Internautas que realizan
ejercicios de Curaduría en medios digitales4; pero la discusión no se agota aquí, porque
La curación de contenidos se empieza a popularizar en parte gracias a un post de Rogit Bhargava del año 2009.
Según el escrito de Bhargava, la curación de contenidos sería el acto de buscar, agrupar, organizar y compartir el
mejor contenido, y el más relevante, de un determinado tema. Para ese momento, fue focalizado más para el
Marketing online; pronosticando el autor el impacto y relevancia futura que tendría tal actividad.
4
Ver: http://ow.ly/esj4a
3
3
inclusive para influyentes escritores, la perspectiva presente y futura de esta actividad, ya
transita la nominada Edad de la curación digital5.
Los Curadores de arte han sido y son considerados figuras de gran notoriedad históricocultural en Museos alrededor del mundo, por su contribución a la preservación de legados
culturales, usando su juicio y refinado estilo, al crear narrativas que evocan responsabilidad,
memoria artística y comunicabilidad cultural. Señala Scime (2009) que hoy observamos
exhibiciones permanentes en línea de excepcionales piezas multimedia, que ofrecen
documentales y análisis reflexivos de noticias sobre sus contenidos, y considera ejemplos
representativos como la presencia del Nuevo Museo Online Rhizome, que colecciona y
preserva nuevos contenidos multimedia digitales y trabajos de Arte; Mubi, curadores
independientes de películas clásicas; o el NYTimes.com Topics, que crea, filtra y agrupa los
archivos The Time's (re-alimentando así la base de datos de su librería digital). Todos estos
ejemplos de Curación online son Casas de colecciones permanentes de trabajos
frecuentemente re-interpretados por Curadores invitados.
Según Weisgerber (2012) para hablar de Curación de contenidos, necesitamos realmente
pensar, por un momento, acerca de los retos que asume un Curador de Arte, quien selecciona
finamente su trabajo, unifica sus criterios alrededor de un tema específico, provee un contexto
marco para las obras de arte y los entornos conversacionales alrededor de la colección a
exhibir. Eso no es diferente para los Docentes del siglo XXI, que deben revisar a través de una
sobreabundancia de información para descubrir cuál es la más importante y relevante, agrupar
esas ideas en módulos para los Cursos, contextualizarlos para la clase y luego, crear un
ambiente para que los estudiantes exploren las ideas y pueden entablar una conversación
acerca de ellas.
Visualizar la Curación de contenido desde una práctica sistemática, objetiva, rigurosa, puede
ser la toma de un camino de próspera riqueza conceptual, la cual debe ser asumida desde
diferentes lineamientos. Para la disertación aquí iniciada, comentaremos dos de ellos que
sirven de base ilustrativa. Educadores como Curadores, concepto propuesto por Weisgerber &
Butler (2012), donde los educadores deben encontrar, seleccionar, editar, acomodar, crear,
compartir, participar y seguir la pista al material, herramientas y todos aquellos elementos que
formen parte del proceso educativo y los medios que puedan ser de ayuda. Desde allí, los
educadores se erigen como los Maestros-Curadores que guían a sus Aprendices en sus
respectivos procesos de curaduría digital; fomentando esta cultura de especialización en su
respectiva comunidad de práctica6. El segundo Lineamiento sería el expuesto por Reig (2009),
el Curador de contenidos como Intermediario crítico del conocimiento:
5
6
Ver: http://ow.ly/esG0A
Según Etienne Wenger (2001) las Comunidades de práctica son un grupo de personas que
comparten un interés, un conjunto de problemas, o una pasión sobre un tema y quienes profundizan
4
[…] profesionales, internos o externos, especialmente implicados con el conocimiento y que
asesorarán sobre la información más relevante en el sector. Su tarea tiene dos vertientes
claramente diferenciadas: la formación en Competencias digitales de manejo de la información (el
dominio de herramientas concretas para la generación y mantenimiento de PLE–Personal
Learning environment– puede ser importante en este sentido), y El profundo conocimiento de la
especialidad (p.2).
Estos lineamientos formarían parte de la base educativa para guiar los trabajos de Curaduría,
los cuales proveen una plataforma conceptual que, por supuesto, con la experiencia ganada
progresivamente, el Docente podrá ir introduciendo otros que a su juicio faciliten una mayor
potenciación de la dinámica de trabajo en su comunidad de práctica, que debería ser en
esencia, social y colaborativa.
3. Del potencial educativo y pedagógico-didacta de la Curación de contenido
La Educación mediada tecnológicamente posee un amplio horizonte permeado por
enriquecedoras opciones facilitadas por Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), y
como señala Giraldo (2005):
[…] por su carácter interactivo, por las posibilidades de cambios en los procesos de traducción
(codificación/decodificación) y en la creación de universos autónomos, alejados de la materia
como propiedad del mundo físico, hasta entonces referente universal por antonomasia de
cualquier tipo de representación […] Si fuéramos a sopesar qué componente o rasgo TIC posee
mayor preponderancia, sería la interactividad, considerada el rasgo más significativo de TIC,
porque en ella está depositada toda la capacidad de elección y de decisión del usuario en relación
con el ritmo, cantidad y profundidad de la información que desea (p. 253-255).
La integración Educación-TIC, posee delante un camino de superación de retos e
insospechadas oportunidades. Sus problemas presentes y futuros sabemos van mucho más
allá del acceso y la conectividad –aunque en diferentes latitudes se debe redoblar esfuerzos–,
sus problemas se focalizan más en el desarrollo y análisis de tres principales categorías
conceptuales uso, apropiación e integración, en diferentes modelos educativos donde sus
actores deben propender por tener previamente competencias específicas para desarrollar el
verdadero potencial TIC en los procesos de enseñanza y de aprendizaje. Con la mediación de
TIC en los procesos educativos hay un intercambio de roles, hay un giro en la perspectiva
su conocimiento y experiencia en el área a través de una interacción continua que fortalece sus
relaciones […] Todos pertenecemos a comunidades de práctica. En casa, en el trabajo, en la escuela,
en nuestras aficiones: pertenecemos a varias comunidades de práctica en cualquier momento dado. Y
las comunidades de práctica a las que pertenecemos cambian en el curso de nuestra vida. En
realidad, las comunidades de práctica están por todas partes […] Los estudiantes van a la escuela y,
cuando se reúnen para tratar a su modo la agenda que les impone la institución y los perturbadores
misterios de la juventud, brotan comunidades de práctica por todas partes: en el aula o en el patio de
recreo, de una manera oficial o espontánea. Y, a pesar del currículo, la disciplina y la exhortación, el
aprendizaje que es más transformador en el plano personal es el aprendizaje que se deriva de la
afiliación a estas comunidades de práctica.
5
educativa hacia lo colaborativo, al asumir una visión esencialmente diferente de cómo
aprender:
Hoy no seguimos instrucciones, creamos nuestros propios itinerarios de lectura, no leemos en el
orden que el autor piensa que sería bueno para nosotros; están surgiendo nuevas formas de
pensar en que la mente usa el ordenador como complemento de su propia capacidad cognitiva
(Cope & Kalantzis, 2009).
Y aquí emerge el potencial educativo de la Curación de contenido digital:
(...) la curación de contenido no queda, valga la redundancia en solamente, una curación, o lo que
es mejor una edición, gestión, administración o producción de contenidos, sino da paso a
la colaboración, porque nos permite como educadores compartir y explorar recursos de cualquier
ámbito y área. Este hecho hace que su incorporación en la educación sea transversal ya que se
adapta a las necesidades y expectativas de, no solo cada comunidad educativa y cada docente,
sino a su vez, de cada educando (Clarenc, 2012. p. 29).
Compartir trabajos de Curaduría digital posibilita la emergencia de un aprendizaje crítico y
reflexivo, dada la visión esencialmente de especialización y la amplitud en sí del acto de curar
contenidos digitales, la cual posee un potencial para la educación y el aprendizaje:
Docentes y estudiantes están adoptando la curación de contenido educativo en el aula para:
coleccionar y compartir material de lectura, fomentar la discusión sobre acontecimientos actuales;
aprender a discriminar entre la inmensa disponibilidad de información, evaluar y realizar una
crítica sobre cierta información en la web; conectar con otros estudiantes y expertos en la materia
para intercambiar
experiencias;
explorar
y
descubrir
un uso
educativo
de
las
redes
sociales mediante la curación de su contenido; convertirse en especialistas de un tema al estar
actualizados de forma constante sobre las nuevas investigaciones que se publican online; exhibir
públicamente sus hallazgos y conocimientos y ganar credibilidad como fuente de confianza
(Vinas, 2012. p.2).
La práctica de Curación de contenidos implicaría asumir como mínimo tres mediadores
pedagógicos: a) la emergencia del uso conceptual de la ergonomía cognitiva. Según Cañas &
Waerns (2003) es una disciplina científica que aporta estudios sobre los aspectos
conductuales y cognitivos de la relación entre el hombre, los elementos físicos y sociales del
ambiente, cuando esta relación está mediada por el uso de artefactos. La Ergonomía cognitiva
tendría así “un marco de actuación amplio que la une a procesos de reflexión didáctica –
comunicativa– investigados desde diversas disciplinas” (Álvarez, 2011). Desde los diferentes
aportes de esta disciplina, el Docente podría empezar a visualizar con mayor detenimiento
cómo ir adaptando cada vez mejor la situación cognitiva dinámica que va sucediendo en el
marco de las interacciones de los trabajos de Curación, al procurar hacer más críticos y
reflexivos a sus Aprendices en el manejo de los Sistemas de Información, y en “el análisis
multimodal para la comprensión completa de los significados generados por todos los recursos
6
en juego, en el proceso semiótico de representación y comunicación de páginas web” (FariaCarvalho, 2011).
b) Re-pensar la interacción social en la comunidad de práctica. La interacción como “elemento
básico en la acción comunicativa entre personas y entre éstas con el medio social y
tecnológico” (Giraldo, 2005), indudablemente se ve potenciada y enriquecida en una
comunidad de práctica que crea, elabora y comparte ejercicios de Curación de contenidos, al
generarse mayores intercambios comunicativos y avances en el crecimiento de los CuradoresAprendices, al posibilitar nuevos usos y significados desde los tópicos abordados, desde los
recursos TIC digitales empleados.
c) Observar con detenimiento la convergencia, yuxtaposición e integración de medios y
soportes técnicos para el ejercicio de los Curadores.
En primera instancia el Educador-Curador sería el experto inspirador, motivador y el eFacilitador que orientaría el proceso de Curación de sus Aprendices, a quien se propone como
base pedagógico-didacta, los siguientes siete principios:
1-Formación en competencias digitales para el manejo de la información. Desarrollar
conocimientos colaborativos e interactivos horizontales, facilitado a través del Grupo que
representa la comunidad de práctica; un trabajo que debe iniciarse con el e-Facilitador y su
autoevaluación frente a sus niveles de competencia digital7y realizar según Jenkins (2006), un
censo de habilidades tecnológicas sobre la base de ejercicios lo más realista posible a los
alumnos, para determinar niveles de competencia en el uso de herramientas digitales.
2-Una práctica de Curación de contenido con valor diferencial, que posibilite la segmentación,
selección y especialización del contenido digital. Re-pensar conceptos tales como pertinencia
temática, creatividad digital, sensibilidad artística, poder de representación simbólica,
experiencia estética, entre otros; ya que el valor intrínseco del ejercicio de Curación va más
allá del simple acto de coleccionar, al respecto White (2012) precisa:
Al considerar la ventaja de colección vs. curación, parece que el coleccionar sirve principalmente
a las necesidades o intereses del colector. Con la curaduría, es una meta más grande, ya que
beneficia no sólo al colector, sino a otras personas interesadas en el tópico. Está destinada a ser
compartida. (p.3).
3- Crear al interior de la comunidad de práctica, referentes claros y concisos de que No
es Curación de contenidos. Exigir rigurosidad en cada etapa del proceso y la reflexión
crítica de la pertinencia del contenido a seleccionar e integrar, como criterio importante,
Las competencias digitales se definen en Wikipedia(http://es.wikipedia.org/wiki/Competencias_digitales)como
la capacidad de usar el conocimiento y las destrezas relacionadas al desarrollo de elementos y procesos; haciendo
uso de las destrezas, conocimientos, habilidades y aptitudes que permiten utilizar de manera eficaz y
eficiente los instrumentos y recursos tecnológicos. Recientemente se conocía vía Twitter, un texto que planteaba
las 33 competencias digitales que un Docente del Siglo XXI debería tener: http://ow.ly/esiZC
7
7
dado que si ampliamos nuestra ventana de análisis, el yo coleccionador prácticamente
de cualquier tema, interés, o tópico, potencialmente sería un Curador…y claro, no todo
es Curación, quizás, colecciones libres, almacenaje de piezas de interés, trayectos
evocados/proyectados, etc. Podría decirse incluso que los usuarios de la web son
Curadores; sin embargo, dista mucho de serlo, potencialmente tal vez, porque en sí la
Curación demanda un proceso metodológico de rigor y de labor cualificada (cualquiera
sea el ámbito de aplicación) que media entre ampliar y condensar un tema específico; un
trabajo de Usuario-Curador sería una combinación muy genérica que podría no alcanzar
a determinarse de valor agregado: “La Curaduría de contenido no es lo mismo que el
intercambio social, re-enviar o volver a compartir una información, vincular o favorecer un
elemento específico de contenido” (Good,2012).
4-Carácter multidimensional del ejercicio de Curación de contenidos. Intrínsecamente la
Curaduría posee un carácter multidimensional (comunicativo, educativo, tecnológico) que
requiere de la convergencia de medios y soportes, dado que la Social Media ofrece una amplia
gama de posibilidades con visualizaciones alternativas, simbólicas y diferenciales de la
información.
5-“Definición de espacios de trabajo ArtScience-Labs8, que jerarquizan la puesta en
conjunción de educación/producción/exhibición” (Piscitelli, 2012). Pensar la posibilidad de
implementar este tipo de proyectos que se enmarcan en la estrategia de “inmersión en la
cultura digital y pensamiento de la complejidad de alto rigor y suma fluidez, destacando nuevas
formas de integrar contenidos, entre alumnos y docentes”, [perspectiva de la Curación de
contenido digital] organizando todo el trabajo en torno a proyectos dinamizados por
herramientas Web 2.0., y observar, según Piscitelli (2012), la posibilidad de estructurar las
materias en nodos troncales, que pueden ser temáticos, proyectuales, por timeline, por nodos
significativos, o siguiendo una línea de trabajo de diseño a determinar.
6-“El entorno cambiante se convierte en un catalizador de nuevos aprendizajes” (Piscitelli,
2012). Los ejercicios de Curación online irán permitiendo acceder a otros significados, a
conexiones inéditas, a la ampliación de la experiencia de Aprendices-Curadores, quienes
compartirán con su Maestro-Curador que a su vez, mueve su centro de flexión pedagógica:
“ya no importa la transmisión de contenidos, sino la transacción [crítico-reflexiva] de
[conocimiento], información, datos y formatos, basados o en vía de alcanzar, narrativas
transmedia9”.
Los espacios Labs Art Sciencie son laboratorios de ideas, experimentos de arte y diseño en las fronteras de la
ciencia. Una cultura fundada en 2010 por el profesor de Harvard David Edwards. Mayor información:
http://artsciencelabs.org.
9
Historias diseminadas por diferentes canales (Cine, TV, Internet/web, videojuegos, móviles, eventos reales,…) en
lugar de concentrarse en uno solo. Cada canal debe aportar aspectos nuevos al todo, de forma que los contenidos
8
8
7-Intercambio de miradas o Re-interpretar la Curación. Ya con ejercicios validados, sería
pertinente re-interpretar bajo el lente conceptual de un Curador invitado, pues esas nuevas
miradas, pueden nutrir todavía más la experiencia, al igual que enriquecer y potenciar el
trabajo colaborativo, al pasar de productores a lectores, de intérpretes a productores. Una
opción que bien merece tenerse en cuenta, por su óptica enriquecedora y de contraste
arquitectónico.
La Curación de contenido digital como ejercicio de valor agregado, requiere entonces de
tiempo, de paciencia, de saber sopesar la utilidad y validez del contenido seleccionado, como
un Curador de Arte al pensar en el tema de su exposición, el contexto, las piezas que
conformaran la exhibición, en su potencial audiencia, los espacios, el montaje narrativo-digital,
etc. Estos siete principios pedagógicos representan una base sólida para darle consistencia y
mayor pertinencia al ejercicio educativo, que busca el desarrollo cognitivo en sus educandos,
en este caso, mediante la Curación de contenidos. Desde ningún punto de vista son estáticos
o rígidos, por el contrario, son flexibles y susceptibles de ser adaptados a contextos
particulares, enriquecidos desde la óptica singular de la práctica de enseñanza de cada
Maestro.
4. Consideraciones metodológicas para el ejercicio de Curación de contenido
Un trabajo de Curación de contenido digital es una construcción progresiva, segmentada por
etapas, las cuales podemos nombrar en general como: 1) Elección del tópico objeto de
Curación, es decir, el tema específico, que debe ser priorizado por Metadatos, los cuales de
acuerdo con Menéndez, Castellanos y Zapata (2010) describen un recurso en términos de su
contenido, utilización y características técnicas, etc., que permiten su catalogación y por ende,
facilitan su localización, recuperación y uso dentro de soluciones e-Learning. En otras
palabras: “los Metadatos son las características o atributos que permiten identificar con
claridad a los objetos; y la búsqueda de metadatos se hace a través de una información
descriptiva que es almacenada en bases de datos” (Ruíz, 2012).
2) Selección de la Plataforma online. Son variadas, todas con su versión gratuita y de pago o
versión profesional, donde se ofrece un servicio más flexible y con mayor potencial para la
construcción y visibilidad en la Red. Todas tienen en su interior una red social que sirve de
apoyo para seguir diferentes temas, visualizar la variedad de contenido, generar seguidores de
nuestros tópicos e insertarse, en una comunidad de práctica global.
se complementen, se potencien entre sí, y puedan sumergir al público en una experiencia de impacto donde éste
mismo pueda interactuar.
9
3) Determinar las fuentes de contenidos digitales. En una gran diversidad a través de RSS
sociales, etiquetado de fuentes multimedia, conexión a Redes sociales, PLE o PLN (Personal
Learning Network), etc.
4) Investigar, seleccionar y filtrar el contenido, etapa de realización plena del ejercicio, cuyo
límite y actualización dependerá en buena medida de la proyección que el Curador desee para
su trabajo, teniendo en cuenta aspectos prioritarios como: calidad, originalidad y relevancia del
contenido.
5) Organizar, integrar y compartir: contextualizar el tópico tratado, adicionar perspectivas
personales al ejercicio, observar medios y plataformas para compartir sus trabajos.
Ilustración 2: El proceso de Curación de contenidos, según Deborah Rueda. http://ow.ly/esiXG
Y, ¿por qué no pensar un direccionamiento metacognitivo orientador del ejercicio del CuradorAprendiz que se espera vaya refinándose secuencialmente? Boekaerts (1997) define el
aprendizaje autorregulado como una interacción compleja entre aspectos metacognitivos y
motivacionales. Según Swanson (1990), “La metacognición es el conocimiento que cada cual
tiene de sus propias actividades de pensamiento, aprendizaje, y el control que puede ejercer
sobre ellas”. Mientras que Yussen(1985) describe la metacognición como “la actividad mental
mediante la cual otros estados o procesos mentales se constituyen en objeto de reflexión”.
Hacia el cierre de estos criterios metodológicos, se considera igualmente viable la posibilidad
de aplicar un modelo mental para la creación de contenido, como sería por ejemplo un mapa
de contenido, con procesos determinados y secuenciados que permitan visualizar estrategias
para la consecución de contenido de calidad; y es que el “Content mapping” es un campo de
estudio prolífico desarrollado ampliamente10.Sin embargo, ya serían procedimientos que podría
sopesar el Educador-Curador para aportar criterios metodológicos que permitan el
afianzamiento hacia un trabajo más consistente en la Curación de contenidos de sus
Aprendices. Necesariamente el Docente debe adaptar ese modelo o mapa de contenido, para
Mapping Digital Competence: Towards a Conceptual Understanding:
ftp://ftp.jrc.es/pub/EURdoc/EURdoc/JRC67075_TN.pdf
10
10
tener la opción de utilizarlo didácticamente y poder enriquecer sus perspectivas de trabajo.
Bhargava (2009) estratifica su Modelo de creación de contenido en las siguientes etapas:
1) La organización de las herramientas y recursos en línea en los sitios web de las bibliotecas
escolares para que estén disponibles en un solo lugar (Agregar), 2) la extracción de la información
pertinente y sintetizar en un formato conciso (Destilar), 3)
navegar por la literatura de
investigación más actual a través de los medios sociales (RSS feeds, blogs, redes sociales, etc.)
(Elevar), 4) la combinación de medios para crear nuevas ideas (Mashups), y 5) el desarrollo de la
Web para la gestión de la información (Cronología).Los estudiantes pueden guardar sus
creaciones de curación favoritos o suscribirse a feeds RSS (Bhargava, 2009, citado en Valenza,
2011c).
Según Young (2011) la creación de contenido puede proceder de la toma de conciencia de un
Modelo mental, “Content Mapping”, donde estadios como Información, introducción y Creación,
constituyen tres pilares metacognitivos que puede cimentar la concepción de la Curación
online:
Su mapa de contenido debe incluir todas las formas de servir a la gente, incluyendo cosas como
los estados de cuenta mensuales o banquetes de premios anuales, inscripción a cursos de
formación o un cálculo de la hipoteca. Cualquier cosa que tenga que ver con su relación, con
aquellos a quienes sirve, deben ser incluidos en el mapa de contenido (p.68).
Así, el Educador-Curador debe propender por una praxis de Curación digital multidimensional,
que se avizore anclado a una nueva concepción de la pedagogía moderna: Educadores como
Curadores (Weisgerber & Butler, 2012) destacada anteriormente además, como un
lineamiento. Aunque en plena efervescencia por su reciente formulación, con un amplio
camino de validación académico-investigativo delante, es la apuesta a la que nos hemos
aunado aquí; una concepción que busca, ante todo, oxigenar la práctica educativa actual,
donde los Educadores puedan erigirse como Curadores que forman a sus AprendicesCuradores bajo criterios rigurosos y sistemáticos como se ha analizado en este artículo.
Finalmente, y no menos importante, es que los Curadores puedan observar su idoneidad como
editores que re-piensan medios digitales, la gramática multimedia y la investigación
mediatizada -temas con amplio desarrollo en nuestro tiempo, que excede al propósito y
espacio para su exposición aquí-.
Tanto los lineamientos, principios pedagógicos, como los criterios metodológicos expuestos
anteriormente, son mediadores hacia la cualificación educativa y profesionalización de la
práctica de la curaduría digital; sin ellos, estaríamos frente a simples ejercicios casuales de
colección, que difícilmente, podrían ser llamados, Curación de contenidos.
A modo de Conclusión

Tras discurrir por el ejercicio in situ del Curador de contenidos o Content curator y
abordar su visión educativa, sin lugar a dudas, estamos ante una actividad con buen
11
potencial pedagógico-didáctico, que puede re-definir las prácticas convencionales en el
aula, al posibilitar la utilización crítica de recursos TIC digitales, generando más
diálogos e interacciones académicas en una comunidad de práctica presencial y
eminentemente en un contexto de interactividad virtual.

Se Coincide con Van Burskirk (2010) al visualizar la Curación de contenido digital como
una “evolución natural de nuestra conciencia global en red”. Estamos dando pasos
significativos hacia la creación de un cerebro global, de todo tipo, mediante la
codificación de conocimientos humanos y el seguimiento de la actividad humana.
Usamos los nodos humanos de esta red para reforzar algunas de esas conexiones,
mientras que otras, ayudan a mejorar la función global del cerebro como un sistema,
que a su vez, aumenta su poder, cada vez que alguno de nosotros tenemos que usarlo.
Al realizar Curación, por cualquier razón y en cualquier forma, estamos mejorando la
conexión de la red neuronal global.

Se reafirma la idea expuesta por Kanter (2012) quien considera que en buena medida
el valor de la Curación de contenido radica en que es una práctica trans-disciplinaria,
del forjar sentido de inteligencia colectiva, en esencia de desarrollo cognitivo y de
inmersión en la potenciación de habilidades en el campo de la literacia mediática11.

La práctica educativa del Curador de contenido tiene una conexión directa y ampliada
respecto a la visión del aprendizaje en general, ya que podría establecerse, como se
hace en diferentes latitudes, “frente al sobrepaso de la asistencia reduccionista de los
LMS”12 –Learning Management System–, su integración a las redes de aprendizaje de
cada aprendiz (PLE o PLN), teniendo la consistencia además, de ser parte de la Era
Educativa Abierta(Open Learning), desde la cual se privilegia procesos de aprendizaje
autónomos y socio-colaborativos.

La Curación de contenido digital representa un ejercicio de fortalecimiento en
competencias digitales, exigidas cada vez más en nuestro mundo globalizado, en
nuestra Sociedad digital13. Una actividad que demanda re-pensar nuevos usos y
significados Social Media, coadyuvando a ese avance en la integración Educación-TIC,
sin olvidar que a su vez, oxigena y refresca el ejercicio docente, conduciéndolo a otra
práctica educativa, a otros usos mediáticos y –quizás–, a un nuevo estadio en la
dinámica evolutiva de su quehacer profesional.
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